Veneno
por Armando Q.(Perú)
Hoy de nuevo, comencé a pensar en
lo mismo, siendo empujado a ese rincón, al claroscuro. No distingo las
tonalidades, no puedo ver mas allá, solo figuras borrosas se asoman a mi paso,
lo familiar ahora me confunde, lo normal es anormal, no entiendo como es que
hasta hoy sigo en pie, antes habiéndome tropezado con todo. Las luces apagadas,
los ruidos acallados, todo es confuso en donde estoy ahora, todo tiene un final,
nada es salvable, nadie lo logra, nadie logra escaparse de la atmósfera que
propago, todos terminan asfixiados ya
que, soy el veneno que respiras. Como si lo llevase impregnado, y sin darme siquiera
cuenta, lo comparto no queriendo hacerte daño en un principio, y este se alimenta
al mismo tiempo de mí, materia oscura, entendiendo que es un inquilino que
habita mi cuerpo. Camino y me tropiezo, logro gatear hasta donde la seguridad
me envuelve, pero nada me brinda calor, sujeto con mis manos la esperanza, que
en algún momento cambiara mi suerte, pero no he logrado convencerme de que esto
es solo una prueba más. No parece ser una prueba, son las furiosas olas de las muchas preguntas que logran golpearme, y sin poder responderlas, logro solo
protegerme del oleaje de lava caliente que quema cada poro, estoy solo
confundiendo mi estado, creyendo que esto es normal, siendo algo mas que nada,
la furia de la oscuridad que llevo dentro, asomándose, creciendo, vertiéndose a
cada paso, sintiendo como me invade, me penetra, sabiendo que no estoy a salvo,
quiero creer, que pronto todo pasara, pero por mas que los minutos sean horas,
y las horas parecieran días, y los días se convirtiesen en años, estoy seguro
que mi vida será un soplo. Ya ha pasado un minuto, y aun no muevo ningún músculo,
pero cada fibra de mi cuerpo la siento pesada, acabada, desprendida de toda
fuerza, me siento viejo y no puedo con todos estos años, la cabeza en bola, los
cuervos saltan a mi alrededor, los gallinazos con sus ojos líquidos esperan mi derrumbe, mi
ultimo suspiro, mi momento cobarde, en donde le digo no a la vida, el momento
cuando me escape, pensando que morir es eso, un escape, siendo este el preámbulo
de todos mis tormentos, luego viene el caminar por la lava de los infiernos que
me esperan.
