Escritores Invitados
por Dreyko(Perú)
Fuente: Blog Bítacora de un Marrón
Bitácora de un Marrón (Marrón a cargo: Calichin)
cacería de sueños
Ocurrencias:
Ustedes lo llaman trabajo, algo que es normal, no los
puedo corregir, no los culpo por eso, es sin duda, eso, un trabajo, simple, sin
riesgo dicen algunos; pero olvidamos uno importante, el de poder perder la vida
misma, sin que puedas hacer algo para que no ser consumido. Ya que estamos
amarrados a quedarnos con solo un mísero sencillo cuando nos den una patadita
en el rastrero, esa es la verdad, cuando sin advertencia, decida la oficina de
“recursos humanos”, que debe la empresa recortar el personal. Sin anestesia y
sin comas. Ha ocurrido con muchos compañeros, los he visto irse sin despedirse,
pensaran ustedes que son malagradecidos, pero no, no se equivoque señor,
señora, al juzgarlos. No, sin duda alguna no lo son. Serán todo menos eso, serán
bandidos, rateros, mejor que criminales, pero malagradecidos no, eso no, saben
decir gracias al momento de recibir un incentivo, un regalo, una propina,
estirando la mano para ello, ya sin razón alguna puedes llamarlos como sea,
pero muy pocos conocen la realidad, la
verdad.
-Amigos en el trabajo no hay-, profesan algunos, compañeros quizás, a lo mucho podrás ser llamado como tal. Pero es uno, quien mueve aquellos hilos para convertirlos en lazos, que muevan montañas. Ya que por un amigo, se hace mucho. Y eso es poco.
-Amigos en el trabajo no hay-, profesan algunos, compañeros quizás, a lo mucho podrás ser llamado como tal. Pero es uno, quien mueve aquellos hilos para convertirlos en lazos, que muevan montañas. Ya que por un amigo, se hace mucho. Y eso es poco.
Muy pocos lo saben, será entonces
cosa que siga pasando el tiempo, es cuestión de esperar a que llegue nuestra
oportunidad, nos la deben, nos deben tanto, el gobierno nos lo debe, somos
seres humanos, nos quitan lo que producimos, nos regalan lo que por derecho nos
corresponde, “un poco mas”, solo eso queremos,
pero por mas que queramos, por mas que deseemos, no vendrá nadie a rescatarnos,
no vendrán a nuestra ceremonia, pasaran los años y seguirá lo mismo, la misma
rutina, las mismas horas de trabajo, doce para ser exactos, pasando cada una,
sin mero anuncio de que la vida se nos va, nos sorprenderá la vejes, es así, así
será, así es, es como dijo un día mi padre, que en paz descanse en el retiro,
no somos nadie, pero cuando llega la oportunidad y la aprovechamos, es ahí, en
ese mismo lugar, ese día, en ese preciso momento, es cuando empieza nuestra
historia. -Sabrás esperar-, sabrás esperar, pero no siempre podrás decir que la
aprovechaste del todo. Que sea lo que Dios quiera, metamos a los Santos también
en nuestra espera. Suerte en tu travesía.
Ustedes lo llaman así, yo no fui
quien puso aquel nombre a esta actividad, soy un Leopardo negro atrapado tras
los barrotes, caminando de un lado a otro, sin saber como salir, soy eso, un animal
enjaulado, que quiere sentir de nuevo el suelo debajo de sus patas cansadas,
quiere sentirse libre, de vez en cuando, pasear por las praderas azules de
colores verduscos. Pero no puedo, los barrotes de papel me lo impiden, las
normas me lo prohíben, mis supervisores y jefes me aconsejan esperar, y
seguimos en lo mismo. Pero yo creo tener alas, yo veo como las plumas se alzan
con el viento y quieren destrozar las ráfagas en estruendos, surcar las
arenosas playas de mi tierra, verme viajando por el mundo, vale soñar, si, vale
la pena soñar, ya que sin tus sueños no sos nada. Mas que un trozo de carne sin
merecimiento, ya que eres quien tiene que escribir tu propia historia, no lo
hagas con cualquier tinta, usa la indeleble. –acompáñame, nos vamos de cacería,
los sueños yacen allá afuera, esperándonos-