abril 12, 2013

pido tiempo y me mandan a callar [por Armando Q.(Perú)] [Escritores Invitados]

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Escritores Invitados
por Armando Q. (Perú)


pido tiempo y me mandan a callar






Pido tiempo y me mandan a callar. Descuelgo el teléfono, saco el reloj de la pared, me deshago del sonido de mis celulares, me dispongo a dormir. Ya que he tenido una semana larga, de full amanecidas. Quiero dormir, pero entre dormir y estar despierto, el cuerpo termina por no obedecer. Entonces me levanto, y encuentro que el ordenador esta prendido. No sé cuándo, no recuerdo en que momento deje prendida la maquina, me cuestiono, y deduzco que esta prendida desde la tarde de ayer. Me siento en la silla que siempre se encuentra junto al ordenador, doble clic, y comienzo a golpear las teclas sedientas. Mi cabeza ahora no puede hilvanar nada, todo se pierde en el intento de ser coherente, no lo puedo ser hoy, solo quiero escribir –en el facebook, me piden escribir del tiempo- de la que me salvo, no sé escribir de los minutos que paso viviendo sin rumbo. Pero si, de los recuerdos que me dejan aquellas horas que envuelven a este cuerpo, escribir de aquellas personas que me arrullan en el telar de su amistad, en aquel amor que saben expandir sobre este cuerpo poroso, si viviera de esto, seria difícil subsistir. Morirían varios en la berma de mi casa, esperando monedas de cobre que nunca llegaran de mi parte. Ya que no soy bueno en lo que hago, si lo fuera, no me encontraría escribiendo de un ahogo, de una falta, de una sequedad por dentro. De no poder escribir en la semana, seria más fácil, escribir de la nada.

Mis manos sufren de un hormigueo, y no pueden contener las ansias, así que el golpeteo se esmera por dejar un pergamino digno de ser leído por ustedes. Pero no gusta nada el resultado de estos últimos veinte minutos. Soy presa del entusiasmo, y nuevamente le doy clic por tercera vez a “Eliminar”. Algunas cosas han cambiado, como por ejemplo, ahora mas que nada, se, que escribir no es nada fácil. QUE EN MI CAMINO HE ENCONTRADO A QUIENES NO ENTIENDEN, CUANDO SE TOPAN CON MIS LETRAS POBRES, Y SOLO INSULTAN MI “INTENTO”. LLEGAN A CREARSE UN CONCEPTO ERRÓNEO DE MIS PENSARES, Y CREEN CONOCERME. TAN MALO NO SOY. NO LOS ODIO, LOS OIGO, Y UTILIZO ESA FUERZA QUE ME ENTREGAN PARA SEGUIR ADELANTE. La labor es tediosa, locamente maltratada por mi, escribir es el olvido de una vida que ha cambiado no siempre para bien. Pero me he entregado no de lleno, así lo digo, así se lo cuento, para que sepa, ya que escribir te coge un tiempo, que piensas, puedes utilizarlo en otras cosas. Ahora último solo le dedico algunos minutos, sin dejar de hacerlo. Sin que pasen muchos días. Trato de escribir lo más seguido que pueda. Pero como siempre, las horas han sido acumuladas, y el estilo que ahora puede ser cuestionado, es lo que ahora llamaría mi sello. Así que, escribir es el resultado de estos últimos años, la idea no errónea de una vida pasada a un papel que puede ser olvidado en el ordenador y no ser publicado.

2004, si mal no recuerdo fue el año en que empecé a dedicarle mas tiempo a conversar conmigo mismo. Conversar, si, ya que escribir es conversar con nosotros, antes, de empezar a hablar con los demás, por intermedio de nuestras letras. Primero debemos cerrar algunas heridas. Para esto utilice algunos cuadernos que aún tengo en mi poder, llamarlos Diarios, seria quitarles en mas, el verdadero motivo de su existencia. Me enseñaron a errar, ya que errar en este oficio es más que nada la forma más valiosa de aprender. Aprender a escribir, aprender a hilvanar las letras, para que, quien lea, entienda  como es que la herida sangra.
Pero ya Yo escribía desde antes, luego del colegio, cogía algunas hojas y les entregaba los pocos parches, que han de seguir en aquellas tiernas hojas verdes, pero como ha de ser la vida. Lo que leí, nunca gusto. Es cuando decidí, salir a buscar un público. Y heme aquí. Sangrando por dentro, encontrando un camino, saludando a los no creyentes, y también a los amigos de oficio, saludando a las personas que aun creen en este espacio. Sonriendo, ya que sonreír, es el arma más poderosa para un día de sequedad, para sobre llevarla. No dejes nunca de hablar contigo mismo. Me despido, solo por hoy.

Escritores Invitados
por Armando Q. (Perú)


I. 
Lo que más importa es la vida: el estilo debe vivir.


II. 

El estilo debe ser apropiado a tu persona, en función de una persona determinada a la que quieres comunicar tu pensamiento.


III.

Antes de tomar la pluma, hay que saber exactamente cómo se expresaría de viva voz lo que se tiene que decir. Escribir debe ser sólo una imitación.


IV.

El escritor está lejos de poseer todos los medios del orador. Debe, pues, inspirarse en una forma de discurso muy expresiva. Su reflejo escrito parecerá de todos modos mucho más apagado que su modelo.


V. 

La riqueza de la vida se traduce por la riqueza de los gestos. Hay que aprender a considerar todo como un gesto: la longitud y la cesura de las frases, la puntuación, las respiraciones; También la elección de las palabras, y la sucesión de los argumentos.


VI. 

Cuidado con el período. Sólo tienen derecho a él aquellos que tienen la respiración muy larga hablando. Para la mayor parte, el período es tan sólo una afectación.


VII. 

El estilo debe mostrar que uno cree en sus pensamientos, no sólo que los piensa, sino que los siente.


VIII. 

Cuanto más abstracta es la verdad que se quiere enseñar, más importante es hacer converger hacia ella todos los sentidos del lector.


IX. 

El tacto del buen prosista en la elección de sus medios consiste en aproximarse a la poesía hasta rozarla, pero sin franquear jamás el límite que la separa.


X. 

No es sensato ni hábil privar al lector de sus refutaciones más fáciles; es muy sensato y muy hábil, por el contrario, dejarle el cuidado de formular él mismo la última palabra de nuestra sabiduría.

Friedrich Nietzsche