Escritores Invitados
por Dreyko (Perú)
de los amigos que perdí
has notado
En esta semana unos
acontecimientos han puesto a pensar a este humilde escribidor. Al punto, de
-tomarme unos minutos para pensar, dialogar conmigo mismo, mirar a mi
alrededor, y meditar - He notado que las personas cambian, que también en gran
medida nosotros también llegamos a cambiar, cosa que tu también te has dado
cuenta por ti mismo, o alguien te lo ha hecho saber, pero por otro lado, muchas
veces no somos consciente de ello, al punto de no prestar atención a pequeños
detalles –el amigo que ya no frecuenta tu circulo, el familiar que ya no llama,
la amiga que de pronto no te responde las llamadas, el amigo o amiga que
perdiste- estamos inmersos en un hoyo, al que llamamos vida, que no nos damos
cuenta, hasta que la ausencia de esta persona, o al enterarnos de ese algo que
nos falta, nos impide seguir. Te formulas infinidad de preguntas, pero todas
ellas llegan a ser solo formulas que te llevan a muchas otras. Decidí parar un
momento, acallar las muchas voces de afuera, y solo escuchar la mía propia,
escuchar a quien realmente tengo que escuchar, callar quien solo habla para sí
mismo, mirar atrás, recordar mis errores, salvar lo que se pueda salvar. Nunca es
tarde para intentar hacer algo.
Me puse a pensar en todo esto,
al recibir una noticia que me regreso de
golpe al pasado, por lo que pude hacerme una idea, de cómo un amigo mío habrá
recibido la misma noticia, conociendo la historia que encierra a mis dos amistades,
no creo que la haya recibido con bombos y platinos, o mucho menos del mismo
modo que Yo. Llegue a pensar que el arrepentimiento, tocaría su puerta, o preguntarse,
si hubiera hecho las cosas en aquel tiempo de una forma diferente. Ya que su
comportamiento, el de mi amigo, lo recuerdo bien, hicieron que mi amiga, se
fuese alejando poco a poco, al punto, de no tener noticias de ella. Hasta hace
unos meses, en que me encuentro con ella, mi amiga ya con un aire Maternal, y
sus ojos todavía líquidos, alegres, subliminal ella, contagiándome con su alegría,
al punto de ponernos al día con todos los acontecimientos que nos perdimos,
porque a decir verdad partidarios los dos, por dejar que pase el tiempo, no fui
caballeroso, en saludarla en algún cumpleaños, o devolverle las llamadas en las
pocas veces que su corazón llamo por un amigo.
Mi amigo, por otro lado, se
encuentra bien, mi amiga, ya con su vida cambiando a cada instante ya sea por
una patadita o por algún antojo, comenzando otros planes, otros proyectos, sintiéndose
una persona diferente, decide llamarme para dar comienzo de nuevo a nuestra relación
amical, de lo cual hizo que mi día tuviera un aire diferente. No muy seguido,
un día gris, se convierte en uno donde recuperas a un amigo. Y es más, no muy
seguido la vida te da segundas oportunidades, para hacer las cosas bien. No busques
caerle bien a la gente, busca siempre ser justo. “La felicidad la creas tu
mismo, esta, no saldrá a buscarte” con las palabras de mi amiga, quise terminar
este post.
Escritores Invitados
por Dreyko (Perú)