agosto 07, 2013

Por eso te escribo [ por Flor V. Chávez ] [ Escritores Invitados ]

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Escritores Invitados
por Flor V. Chávéz (Perú)

Por eso te escribo”

“Y entonces se enamoró, de la única forma en que las mujeres inteligente pueden enamorarse… Sí, así como una “idiota”, aunque él nunca fue capaz de entender todos los poemas que le leía para explicar su amor…”
(Ángeles Mastretta)


No quiero olvidar que sucedió.
Que me miraste y sonreíste como antes y que todo volvió a tener sentido, no quiero olvidarlo.
Por eso te escribo, porque sé que el tiempo me hará olvidarte, porque es  el tiempo que juega a mi favor con mis ganas de olvidarte y de recuperar la alegría sin ti, juega en contra de tus recuerdos y también de tus sonrisas, pero yo no quiero olvidarlo. Créeme es importante, no voy a olvidarlo.
El tiempo es tan efímero, se lleva tus recuerdos, porque aunque no quieras la memoria falla, sé que olvidare cosas importantes, sé que con el tiempo, olvidare ese brillo y ya no tendrán en mis recuerdos, tu sonrisa color.
Por eso te escribo, para inmortalizar tu mirada en una hoja de papel, en los archivos de un blog electrónico. ¿Lo puedes comprender? Quiero que vivas por siempre en mí.
Aun puedo verte viniendo hacia mí, queriendo o sin querer, solo tú lo sabes, pero no me lo hagas saber, al menos no aun.
Camine despacio sin saber que haría mi corazón a continuación, si te dejaría pasar, las piernas me temblaban, te vi acercarte despacio, como si fuera en cámara lenta, pero tú ibas despacio, te detuviste, y a mí se quebró la voz, era como si todas las palabras se hubieran atorado en mi garganta y yo luchaba por no dejarlas salir. Y no lo hice, y no se me si arrepentirme.
Pero tú me sonreíste y mi cielo gris, mi mundo que se arrastra con mi pasos, sonrió; y por esos cinco minutos todo tenía sentido, la lluvia que caería dentro de unas horas y aun no lo sabía, el llanto del bebe de la esquina, los enamorados besándose en el callejón, el cielo gris de invierno. Todo. Todo tenía sentido, todo era perfecto cuando sonreíste para mí.
Por eso lo escribo, para recordarlo por siempre, que una tarde fría en lo inconstante de la vida, en mis días fríos de invierno, en que decidimos vivir separados, sin premeditarlo, sin un plan, mi corazón me escupió en la cara la razón por la que siempre voy a amarte. La razón por la que solo verte sonriendo con esa mirada que te delata, con esos ojos que me escrutan, te amo.
Y por eso te escribo, por si un día el tiempo me roba este día y tu recuerdo se va empolvando, leer estas líneas me impedirá olvidarlo.

Por esa y miles de razones más siempre te escribo.