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¿Cuánto hace que no veo el mar?... no recuerdo bien, creo fue hace tres meses, las variantes del viento al rosar mi frente y la candente arena entre mis dedos, extraño eso y la espuma que encuentra paradero en el término de la playa llamada orilla -¿Cuánto hace que no veo la playa que encuentra como hacer que vuelva al pasado manso de mi Niñez?- , -¿ cuando hace que no veo aquella playa pedregal, la del Yauca?, -ya que antes de sentir la arena, primero sentí las piedras calientes-, claro, cómo no recordarlo, si fue ayer que mis hermanos John y Jairo, con 15 y 10 respectivamente bajo la vigilancia de mama, nos aventurábamos a las orillas, para darnos chapuzones en lo salado del agua, es cuando uno de ellos suelta la pregunta: -¿porque el Agua no es dulce?, respondiendo la sabia de mi madre, - así quiso Dios, que fuera-, los ojos del guagua salían de sus orbitas, para darse contra aquella sabias palabras, - SI, Existe alguien llamado Dios- la admiración se deja ver en su rostro, y desde aquella vez, la curiosidad de aquel guagua nunca seria saciada.
Las rocas eran más grandes en el rompeolas, y las olas eran calladas cuando mama gritaba: -Joooooohn cuidado, que te vas a resbalar papito-, los ruegos porque la zambita, no se olvide nunca el almuerzo era lo que nos atraía a su regazo, algo ligero siempre, tallarines era lo más sano y económico; después de calmar nuestra curiosidad por todos los rincones de aquella orilla pedregosa. Cuando íbamos a la playa: mama, mis hermanos y Yo, al corazón del Yauca (al callao) era lo mágico de ser peque’, para hacernos un cuartel con las piedras, y de aquel ejercito de cangrejos o conchitas que haz de encontrar siempre, jugar en la zona que hacíamos nuestra, dejarse llevar por la corriente de una playa que no tiene pierde, hacer amigos en aquella playa de rostros diferentes, era la variante, y una suave brisa siempre dormía a mi Madre, dejar que el sol haga con sus rayos mi piel más oscura, y como no olvidar cuando uno de los tres, el destino escogía, extraviar cuando al subir al Bus, debíamos de tener cuidado de no perder una de las Sandalias que portábamos, ya que era una de las cosas que más recuerdo, mi madre gritando al chofer que detenga la mionca (bus) para poder ir tras el calzado de uno de sus hijos. Recuerdo todo esto, y es ahora que recuerdo que regreso más fuerte, he vuelto, de aquella playa, y me siento más grande, vuelvo ya hombre, pero de igual forma he jugado, y he vivido de la misma forma cada momento de mi niñez, aquí en mi Memoria. Miro el atardecer de colores variados, donde el rojo predomina y es Mágico, pensar que es aquí donde deje mi Alma varada, la neblina esta por caer cual manto, cobijar mi tierra querida. El Boys perdió, y mi Alianza se consagro de nuevo, la rosada llora, y la blanquiazul es ahora una fiesta. La orilla es ahora paradero de mis recuerdos mas mansos, los de mi niñez, mis dedos son cubiertos por una ola que me da la bienvenida y me advierte que la marea está subiendo. Me despido de este Aire, me despido del Mar, me despido del Puerto, me despido de la espuma, me despido de las Piedras. Me despido. Es cuando me llama la atención de que ya no caen lágrimas, es cuando, sí, he vuelto a casa un poco más fuerte.
Las Siguientes Fotos, fueron tomadas en el Callao 4/5/2011 Invitados: Jairo Quiroz C., Jose Carlos Dongo y el Teambeke Cubano(conocido entre los mortales como Juan de Dios)
El Cano |
El Cano, visita el Callao lindo, mi barrio |
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